Podríamos decir que existen dos tipos de estudiantes: los que estudian memorizando y los que comprenden. Para llegar a ser el estudiante perfecto deben combinarse estas dos cualidades, convirtiéndonos en algo así como memorizadores comprensivos. Lo único que necesitaríamos para convertirnos en este tipo de estudiantes, es potenciar aquello en lo que flaqueen nuestras fuerzas; como bien podría ser nuestra capacidad de memorización.
¿Quién no se ha sentido perdido cuándo en el repaso del temario nos hemos dado cuenta de que solo tenemos una idea general sobre la materia? Después de horas, días y semanas estudiando, no podemos permitirnos tener una idea general sobre el temario, debemos matizar esta idea con conceptos, enumeraciones, clasificaciones y términos exactos.
Para ello proponemos una serie de técnicas muy sencillas de memorización, con las que activar la memoria.
Indice de contenidos
Técnicas de memorización para activar la memoria
-
Imaginación y asociación
Este tipo de técnica es muy útil para recordar clasificaciones y conceptos. Para recordar aquello que desees memorizar, piensa en ello como en una imagen, asociándolo a algo que sea familiar para ti. Incluso podemos ir más allá, hacer que algo sea familiar a través de nuestra imaginación. En ese caso, descubrimos que lo que queremos memorizar no tiene nada que ver con nosotros y decidimos entonces, relacionarlo a través de una historia ficticia. Podemos explicarlo con un ejemplo muy sencillo; supongamos que tenemos que aprendernos una clasificación sobre problemática infantil: un niño con déficit de atención, una niña epiléptica, una niña celíaca y un niño con un trastorno de alimentación…Para recordar todos estos campos, ¿por qué no personificamos a estos niños? Imaginemos cómo sería su conducta, pongámosles nombre y creemos una historia que nos relacione directamente con ellos. De esta forma seremos capaz de recordar a estos niños durante años.
-
Anotaciones
Anotar la información ayuda mucho a la hora de memorizar el temario de estudio, siempre se ha dicho que los datos se retienen mucho mejor si se escriben. Estas anotaciones no solo sirven para resumir los contenidos o esquematizarlos para que nos ayuden a comprenderlos; sino que pueden tratarse de dibujos asociados a un concepto, fases de un discurso o de listas de términos a memorizar. Esta técnica es infalible para activar la memoria, no hay mejor manera de clasificar términos según su relevancia, que a través de los rankings.
-
Rimas
¿Quién no ha estudiado alguna vez rimando unos términos con otros? Las rimas ayudan a activar la memoria asociando el sonido de una palabra con otra, de forma que si nos acordamos de la rima, recordaremos también el término principal. Siempre se ha dicho que a través de la música nuestro cerebro es capaz de memorizar sin apenas esfuerzo.
-
Siglas
De los creadores de las rimas, llega una técnica milenaria de memorización, las siglas. En la práctica, la técnica más utilizada es el uso de acrónimos, que permiten crear palabras a través de términos individuales. Según nos indica la RAE, los acrónimos son un tipo de sigla que se pronuncia como una palabra, por ejemplo, o(bjeto) v(olador) n(o) (i(dentificado). Volviendo al ejemplo anterior sobre problemáticas infantiles, tenemos varios sujetos que memorizar: un niño con déficit de atención, una niña epiléptica, otra celíaca y un niño con un trastorno de alimentación. Podríamos clasificarlos como A(tención) E(piléptica) C(elíaca) A(limentación). A través de esta técnica podrás asociar términos y recordar largas listas de ellos.
¿Has aplicado alguna de estas técnicas en tu método de estudio? ¿Conoces alguna nueva? Cuéntanoslo.