Medidas metodológicas para la actuación del tutor ante problemas conductuales (Internivelar)

Técnicas para la reducción de conductas     

Por lo general cuando se interviene para modificar una conducta es con el objetivo de desarrollar una nueva, así como habilidades que permitan actuaciones más adecuadas. Es común tener que reducir conductas que alteran, dificultan o que impiden el desarrollo del alumno y su adaptación.

Para eliminar conductas como peleas, gritos con compañeros etc., se suelen usar técnicas inversivas, el problema es que suelen generar menos respuestas emocionales y de contra control en las personas que se aplica.

Extinción de la conducta 

Consiste en suprimir el reforzamiento de una conducta que antes se ha reforzado. Si aplicamos este método de forma continua veremos una reducción importante de las conductas que no se deseen.

Este método suele ser más lento que los otros métodos de reducción de conductas, incluso puede llegar a incrementar la conducta en un inicio, pero si se mantiene la extinción, al final la conducta empezará a disminuir hasta que se elimine por completo. El problema es que no puede aplicarse y tener efecto de manera inmediata.

¿Cuáles son las características de la extinción de una conducta?  

1. Cuanto más consolidada esté la acción más difícil será la extinción, y cuanto más esfuerzo se requiera más fácil será de extinguir. Si combinamos procedimientos de refuerzo mientras la extinción será más rápida.
2. La extinción puede producir un aumento de la intensidad y la frecuencia de la misma en los primeros momentos de su aplicación.
3. Puede aumentar la agresividad (agresión debida a la extinción).
4. La recuperación de la conducta solo sucederá tras un periodo de tiempo por lo que habrá que seguir con la extinción.

 ¿Cómo se aplica el método de extinción de la conducta?

1. Usar junto a la extinción el reforzamiento de conductas alternativas compatibles con la que se pretende eliminar.
2. Identificar los estímulos reforzadores que mantienen la conducta que se desea extinguir

Reforzamiento positivo

Normalmente para aumentar la frecuencia de las respuestas aceptadas socialmente se usan refuerzos positivos o estímulos agradables que pueden ser cualquier cosa, acción o situación. Esta técnica es la más usada y más eficaz para ello y se aplica mucho en el campo de la orientación familiar. Si se aplica adecuadamente es una de las técnicas de más duración.

Sin embargo, hay que tener en cuenta variables como la edad, la historia personal y algunos rasgos de la personalidad. A veces hay que recurrir a refuerzos artificiales como becas, reconocimientos etc.

El reforzador artificial se aplica cuando se quiere incrementar una conducta deseada.

Consejos y actividades útiles para maestros

• Utilizar la técnica del subrayado con colores para que el niño se centre.
• Nombrar al niño responsable de dar los avisos en clase.
• Colocar al niño en un pupitre tranquilo, lejos de la ventana, la puerta y más cerca del profesor. Esto ayudará a controlar distracciones.
• Dar órdenes que sean simples y breves.
• No permitirle que deje las cosas a medio hacer.
• Sentarle de espaldas a la clase si su actitud no mejora.
• Observar su trabajo y como lo hace cuando lo tenga que hacer solo.
• Alternar el trabajo de pupitre con las actividades de movimiento.
• Enseñarle a que tenga sus cosas bien ordenadas encima de la mesa.
• Mantener una tutoría con los padres cada quince días para hablar con ellos y explicarles los problemas y decirles lo que ellos pueden hacer para ayudar a su hijo.
• Facilitar a los padres los objetivos de aprendizaje para que hagan de profesores de apoyo en casa.
• No reprender al niño, ni humillarle delante de sus compañeros.
• Animarle y darle la enhorabuena cuando finalice un trabajo y lo haga bien.