Todo el mundo, en el proceso de las Oposiciones, piensa día sí y día también en la fecha de los exámenes, y las preguntas más frecuentes que pasan por su mente son:
• ¿Qué pasa si olvido todo lo estudiado y suspendo?
• ¿Qué ocurrirá si sale algún tema que no me he preparado lo suficiente?
• ¿Qué pasa si, a pesar de aprobar, no obtengo la nota suficiente y me quedo fuera de optar a un puesto de trabajo?
Bueno, tranquilidad.
En primer lugar, también existe la posibilidad de pensar en positivo: “¿En qué lugar acabaré cuando apruebe las Oposiciones de Educación?”, “He obtenido una nota increíble”, “Todo mi estudio y esfuerzo se ha visto recompensado”.
En segundo lugar, SUSPENDER no es una palabra que queramos escuchar muchas veces. Pero existe, y de vez en cuando puede llegar y tocar a vuestra puerta.
Eso sí, depende de vosotros como la queráis recibir. Podéis decirle que de los fracasos también se aprende e invitarla a salir de vuestra mente, o podéis dejarla que entre y se quede para siempre en vuestra habitación con todos los gastos pagados.
¿En qué he fallado?
Una vez hecha la elección de seguir hacia adelante para volver a intentarlo, podéis plantearos algunas cuestiones de por qué de ese suspenso. Estas preguntas interiormente os ayudarán para que en el próximo intento no vuelva a ocurrir e ir con todo más controlado.
- ¿Puede que hayan sido los nervios que me han hecho olvidarme de todo?
- ¿Puede ser que no haya estudiado lo suficiente y por eso no he sabido sacar los temas hacia adelante?
Si han sido los nervios puedes practicar algunas técnicas sencillas de relajación y evitar pensar en temas ajenos que te provoquen un estado de nerviosismo.
Si realmente ha sido que no has estudiado lo suficiente para las Oposiciones de Educación, revisa toda la planificación de estudio y comprueba algunas técnicas que no te hayan resultado demasiado útiles para cambiarlas y ponerlas en práctica en tus próximas Oposiciones.
Conclusión, a todos nos gusta aprobar, y a nadie le gusta suspender, pero cuando ocurre éste último caso, hay que ser positivo y pensar que la próxima vez saldrá todo bien. Y si al segundo intento tampoco se consigue, ya sabéis, a la tercera irá la vencida.