Hay muchos tipos de opositores, por eso nos preguntamos cuál es el opositor perfecto. Los que tienen una gran dedicación y capacidad de esfuerzo. Trabajan horas y horas incansablemente pero en la recta final de esta carrera de fondo flaquean en sus fuerzas, bien por la presión de la prueba final o los nervios o ansiedad acumulada. Por contra, los hay que sacar un gran partido a la recta final del estudio, son capaces de rendir al máximo durante el examen sin embargo cuentan con una menor voluntad para el estudio, careciendo de muchos conocimientos adquiridos durante la fase de preparación de una oposición.
Es por eso que el opositor perfecto es aquel que logra encontrar el equilibrio entre el rendimiento y estudio a largo plazo y la eficacia en la recta final. Aquel que no sucumbe ante los nervios del examen de una oposición. Ese que es capaz de mostrarse resolutivo tanto a nivel teórico como práctico. Una rara avis, en realidad, porque nadie es perfecto y todo opositor cuenta con algún punto más débil.
Como la perfección no existe, pero sí es posible trabajar cierto puntos flacos de cada estudiante, desde APPF hemos pensado en darte 5 consejos o tips para ayudarte en estos momentos tan importantes para ti y conseguir que alcances el éxito en las oposiciones. Especialmente en la recta final de la preparación de una oposición. Sin duda uno de los momentos delicados de esta etapa opositora.
Indice de contenidos
Quedan pocos días, así que una de las claves es planificase para que nos dé tiempo a hacer todas aquellas cosas que queremos lograr. Por eso, prepararse para la exposición oral no va a ser menos.
Planificando los horarios de estudio (y sobre todo, respetándolos) conseguiremos aprovechar al máximo cada día y poder compaginarlos, en mayor o menos medida, con nuestra rutina habitual.
No hay que olvidar planificarse también las comidas y los descansos, ya que para esta nueva época de tu vida debes de estar con todas las energías cargadas y sobre todo no llevarte al límite, ya que te supondrá no poder hacer frente con lo planeado y fracasar en tu oportunidad de ejercer el trabajo de tu vida.
Una vez planificado tu tiempo de estudio, tienes que saber que debes ser constante en la preparación de material, en los ensayos orales… de lo contrario ese esfuerzo previo no habrá merecido la pena y lo habrás perdido ( y no estamos para desperdiciar el valioso tiempo que nos queda).
Organizándote de manera que todos los días que quedan inviertas parte de tu tiempo en lo que se convertirá en el sueño de tu vida, en menos de que te des cuenta se habrá convertido en una rutina diaria de estudio que no te supondrá mucho esfuerzo a la larga.
Con todo tu esfuerzo y dedicación, sin darte cuenta, habrás acabado con todo el temario y estarás listo para realizar la exposición oral.
No debes olvidar, que además de estudiar el temario necesario para examinarte, debes prepararte la parte de la exposición oral.
Deja el miedo escénico y esos nervios que no te van a llevar a ningún sitio, más que al bloqueo.
La exposición la realizarás delante de los miembros de un tribunal que son personas como tú que para llegar ahí también han pasado por lo mismo, por lo que tranquilo/a que no te van a comer.
Para empezar a prepararte la exposición oral, puedes grabarte recitando los temas para luego juzgarte tú mismo y mejorar en los aspectos que consideres oportunos. Incluso tu familia y amigos pueden escuchar
las grabaciones y darte consejos.
Este es el mejor truco que te podemos dar , ya que la clave del éxito de esta parte de la oposición es la práctica (y más practica) de estos largos recitales.
Muchas páginas que habrás leído por Internet te recomiendan que evites los pensamientos negativos, pero siendo realista, como humanos que somos es inevitable y más cuando tienes tanto en juego y tanta presión con esto conlleva. Nuestro consejo es que para evitarlos de forma temporal, ocupes tu cabeza con otras cosas relacionadas de menor dificultad para evitar agobios o intentes mantener la mente distraída ocupando y focalizando tu atención en cosas como tomar un café con un amigo, salir a correr, hablar por teléfono e incluso darte un baño relajante. De esta manera, al no ocupar mucho tiempo de tu día, no tendrás el típico remordimiento del estudiante de falta de tiempo y te sentirás más tranquilo y relajado para volver otra vez con las pilas bien cargadas.
Tanto en tu vida profesional como personal, tener seguridad en uno mismo es la clave del éxito allá donde vayas o te encuentres. En este caso, puedes estar orgulloso, porque si piensas que no la tienes no es así, estás equivocado.
Si estás leyendo este artículo es, principalmente, porque vas hacer un examen de oposición de magisterio o quieres hacerlo y, si has llegado hasta este punto, es que estás completamente seguro que eres capaz de presentarte a un examen de esta importancia o necesitas un último empujón.
No todo el mundo ha llegado hasta aquí, por lo que siéntete orgulloso y adelante, esta es la puerta hacia tus sueños (sin olvidar que nadie dijo que fuera fácil), aprovéchala y saca tu mayor rendimiento y ganas.
Y recuerda, todo esfuerzo tiene su recompensa…¡todo!.
Con estos simples consejos intentamos ayudarte a preparar esta última parte de las oposiciones y minimizar los riesgos, ¡ánimo, es solo el último empujón!
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