Tu primera decisión ya está tomada; vas a presentarte a una oposición. Publicada la convocatoria de la oposición elegida, compruebas su temario y encuentras la relación de temas a los que deberás enfrentarte. El siguiente paso es el de hacerte con el contenido de cada uno de los temas. Algo que no siempre es tarea sencilla ni, a veces, asequible.
Si quieres aprender a fondo todo lo fundamental de cada tema, necesitas tener al alcance de tu mano la información esencial, precisa y actualizada para poder estudiarla como es debido sin dejar nada al azar. Para ello puedes elegir entre buscar la información por tu cuenta (en Internet, bibliotecas, buscando las leyes correspondientes, etc.) y estructurarla a tu manera, adquirir un temario de oposiciones de los muchos que hay publicados por editoriales profesionales, o incluso hacerte con un temario de alguna academia o preparador de oposiciones.
Veamos qué aspectos hay que tener en consideración para elegir un buen temario de oposiciones que nos aporte seguridad y confianza en cuanto a los contenidos a estudiar.
Indice de contenidos
Para poder preparar las oposiciones es importante contar desde el inicio con un temario que sea completo en cuanto a su contenido y que, por supuesto, esté actualizado. No es raro encontrar a opositores que estudian temarios desactualizados, bien por desconocimiento o, en ocasiones, por tener temarios antiguos y utilizarlos para así evitar los costosos gastos que conlleva comprar de nuevo el temario.
Es totalmente desaconsejable estudiar temarios que no estén actualizados. Por eso conviene asegurarse que el libro que tengamos está al día de todos los cambios normativos. Si es necesario deberemos corroborarlo mirando fechas de edición o fuentes bibliográficas de donde cada temario ha recogido la información.
Hoy día, los elevados precios de mercado de los temarios hacen que sea muy frecuente que se adquieran ejemplares en librerías o portales de segunda mano. Cuando esto se haga será todavía más necesario comprobar la vigencia de su contenido.
El temario puede sufrir modificaciones de una convocatoria a otra. Consultar las bases debe ser la primera acción para asegurar que obtendrás el temario actualizado y evitarás estudiar material obsoleto o irrelevante para la convocatoria actual. Las bases pueden proporcionar detalles sobre los temas específicos que serán evaluados, permitiéndote priorizar ciertas áreas del temario sobre otras según su relevancia o tu nivel de conocimiento previo.
El temario de una oposición suele estructurarse en distintas partes que abarcan los conocimientos necesarios para el puesto al que se aspira. Aunque la composición específica puede variar según el tipo de oposición y la administración convocante, generalmente se pueden identificar las siguientes partes fundamentales; una parte común y otra específica.
La parte común puede incluir temas relacionados con la legislación y organización del Estado, la administración pública, derechos y deberes de los funcionarios, y principios básicos de igualdad y prevención de riesgos laborales. Es común en casi todas las oposiciones y establece las bases del funcionamiento del sector público. En oposiciones a nivel autonómico o local, también puede incluir normativas específicas de la comunidad autónoma o del municipio.
A la hora de hacerse con el temario común, con la Constitución Española no tendrás problema, son comunes a todos los opositores de nuestro país, pero si encuentras un temario creado para un ámbito local, autonómico y pretendes estudiarlo ajustándolo a tu demarcación, ten mucho cuidado.
Y es que la parte específica o técnica se centra en los conocimientos específicos del cuerpo o escala a la que se opta. Por ejemplo, en oposiciones para educación (hoy por hoy es la única parte a desarrollar), incluiría pedagogía, didáctica y especialización en la materia a impartir; para sanidad, temas médicos o de enfermería específicos de la especialidad; y para justicia, derecho procesal, civil, penal, entre otros.
Como verás, cada temario incluye temas que son generales pero otros que son específicos de cada comunidad autónoma o normativas locales propias como ordenanzas, etc. Aunque quieras adaptarlos y quedarte solo con la información común, debes tener precaución con posibles confusiones de contenido para no caer en equívocos, así como valorar si merece la pena este esfuerzo por detectar las diferenciaciones.
Hazte con temarios lo más adaptados posible, a tu oposición concreta para poder obtener así, unos mejores resultados.
Puedes optar por comprar un temario publicado por una editorial o por personal de una academia especializada en oposiciones. En cualquier caso, debes asegurarte que sus contenidos sean de total fiabilidad. Que estén confeccionados por profesionales especialistas en el tema en cuestión. A ser posible, con experiencia en el mundo del opositor.
Optar por temarios de editoriales especializadas y reconocidas en preparación de oposiciones es siempre una buena idea. Estas editoriales suelen actualizar sus materiales en cada convocatoria y tienen un historial probado de ayudar a los opositores a aprobar sus exámenes.
Además, la estructura del temario debe ser clara y estar en consonancia, a ser posible, con la convocatoria de la oposición a la que se opta. Es decir, si en la convocatoria se estructura el temario en bloques, es interesante que el libro o temario escogido esté formado por los mismos bloques con sus respectivos contenidos. Esto nos facilitará nuestra tarea de estudio y organización de ideas.
También es interesante comprobar que el lenguaje no sea excesivamente técnico y que esté explicado con la mayor claridad y sencillez posible. Dos aspectos esenciales a la hora de distinguir un buen temario del que no lo es.
Del mismo modo habrá que prestar atención a la extensión del temario. Un temario excesivamente breve es muy posible que contenga numerosas omisiones o poca profundización en temas que requieran de un mayor (y mejor) desarrollo. Al igual que un temario demasiado abundante puede sernos poco práctico, derivándonos hacía una falta de concreción que pueda jugar en nuestra contra y hacernos gastar tiempo de estudio innecesario.
Asegúrate de que el temario esté actualizado. Verifica la fecha de publicación o revisión del material para garantizar que incluya la legislación y normativas más recientes.
Considera si el temario ofrece material complementario valioso, como acceso a plataformas de estudio online, test de autoevaluación, resúmenes, esquemas, y actualizaciones. Esto puede ser muy útil para tu preparación.
Si es posible, accede a una versión demo o a capítulos de muestra antes de comprar. Esto te permitirá evaluar la calidad del contenido, la claridad de la explicación y si el estilo de enseñanza se ajusta a tus necesidades de aprendizaje.
Considera la inversión en el temario como parte de tu preparación. Sin embargo, evalúa cuidadosamente el costo-beneficio. No necesariamente el material más caro es el mejor, pero invertir en un buen temario puede marcar la diferencia en tu preparación.
Si has conseguido un buen temario publicado por una editorial, ¡enhorabuena! ya tienes mucho ganado de cara a preparar una oposición. Sin embargo, desde APPF te recomendamos que no dejes de indagar y buscar información adicional.
Investigar los recursos en línea es otra buena idea para mejorar la preparación de tu oposición. Hay una gran cantidad de información online disponible, como sitios web, blogs y foros que brindan orientación, consejos y ejemplos de programas de estudios para ayudar a los candidatos a prepararse para sus exámenes. Al utilizar estos recursos en línea, los candidatos pueden obtener información sobre temas importantes, estructuras de exámenes y técnicas de estudio para maximizar sus posibilidades de éxito.
Contactar con instituciones académicas es otra estrategia eficaz para adquirir un plan de estudios de oposición. Muchas universidades y academias ofrecen cursos o materiales especializados para la preparación de oposiciones, como programas de estudios, guías de estudio y exámenes de práctica.
Del mismo modo, si decides apuntarte a una academia o contratar a un preparador, pide su opinión sobre el mejor material de estudio disponible. A menudo, pueden ofrecerte acceso a temarios especializados o exclusivos.
Además, es esencial, para sumar puntos y ampliar tus probabilidades de éxito en la oposición, realizar cursos homologados oficiales como los que ofrece APPF.
Recuerda que contar desde el inicio con un temario adecuado es algo de gran valor para no tener que improvisar durante el proceso de estudio. Casi diríamos que en su elección está gran parte del éxito o fracaso final de una oposición, ya que un buen temario nos ofrecerá un recorrido de preparación de oposiciones con menos obstáculos y sorpresas inesperadas.
Seleccionar el temario adecuado requiere investigación y consideración, pero es un esfuerzo que vale la pena para maximizar tus posibilidades de éxito en la oposición.
Por supuesto, deberás esforzarte en tu trabajo diario. No solo con un buen temario vale. Explica o condensa todos tus conocimientos adquiridos con tus propias palabras en forma de resúmenes, esquemas, subrayados u otras técnicas de estudio, que te serán de gran ayuda en tu objetivo por aprobar una oposición.
Y un último consejo; aunque cuentes con un buen temario de partida, no te ciñas únicamente a él, busca completar tu formación con cursos de educación, cursos de sanidad y cursos baremables de justicia como los que ofrece APPF. Estos cursos permiten, igualmente, actualizar tus conocimientos y competencias profesionales, adaptándolos a las últimas tendencias y normativas. Esto no solo te prepara mejor para las pruebas de la oposición, sino que también te equipa con habilidades y conocimientos útiles para tu carrera. Los méritos adicionales que te brinda la formación homologada pueden ser cruciales para superar a otros candidatos y mejorar tu posición en la lista de aprobados.
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